VOZDEVIEJA

Tengo algunos recuerdos de mi infancia muy presentes, como mi primer día de cole en el que de lo mucho que lloré me vomité encima o un día que mi padre se olvidó de recogernos del cole y se hizo de noche, cuando nació mi hermano y de cogerlo en brazos con casi dos años como si fuera un muñeco, o de cuando mi bisabuelo me recogía del cole y me llevaba al hogar del pensionista.

Imagino que por eso mi última lectura me ha removido un poco, porque como la protagonista de la misma, tenía un mundo interior bastante fuerte y vivía un poco en una realidad paralela dentro de mis pensamientos.

El año pasado leí El Evangelio, y fue una de mis lecturas preferidas del 2021, como podéis ver en el post que le dediqué, la historia de Lali hizo que me enganchara a Elisa Victoria.

Vozdevieja salió en 2019 y la verdad que me lo recomendaron bastante pero me daba un poco de pereza leerlo, pero a la vez, el título era como un imán para mí.

Siempre me han dicho que soy una persona que parece que haya vivido muchas vidas, seguramente es porque intento vivir todo a la máxima intensidad, soy muy curiosa, me encanta saber de todo y normalmente se hable de lo que se hable, suelo escuchar con atención e intención, por eso sentía Vozdevieja un poco como yo, porque yo también tengo muchas vidas o soy un alma vieja como Marina.

Este libro de Elisa Victoria es la voz de su protagonista, Marina, una niña muy redicha de unos 9 años que vive en la Sevilla de verano soporífero de los 90’s, aunque yo en los 90’s era un poco más mayor que ella, he encontrado muchos lugares comunes, como por ejemplo la fijación por Chabel, la muñeca estrella de esa época.

Como en mi anterior lectura, esta novela costumbrista está llena de la inocencia de una niña que a la vez es muy adelantada para algunos temas, o mejor dicho que tiene una curiosidad insaciable por descubrir, todo narrado en un tono divertido.

Vive la mayor parte del tiempo con su abuela que le permite todo, dormirse a las mil, alimentarse de fritos, ver cualquier cosa que den por la tele, y con su madre, que pasa largas temporadas en el hospital porque está enferma.

Como se muda muchas veces y se cambia de colegio, no tiene demasiados amigos de su edad y eso se le nota, porque es muy adulta en pensamiento, una anciana en el cuerpo de una niña, de ahí lo de Vozdevieja, que es como le llaman en el cole (lloraba de la risa cuando Marina lo cuenta “tengo la voz cascada”)

Tiene momentos muy tiernos, sobre todo en los que se plantea la muerte de su madre, y en cómo le hace prometer que le comprará un bote de su perfume y una cinta de Diana Ross por si se muere tenerlo de recuerdo.

En ocasiones, Marina me ha recordado muchísimo a Manolito Gafotas, un libro que me leí ya siendo mayor, creo que con 17 o más, me gustó tanto, y aun me encanta ver la película cada vez que la echan en la tele (la tenéis en RTVEPlay aquí), me río mu-cho… pues Vozdevieja es un poco así, quizás no tan cómica, pero muy del estilo siendo Marina más heavy en todo que Manolito.

Vozdevieja me ha gustado, pero debo decir que me gustó mucho más El Evangelio, pero es que a mí todo lo que incluya el tema religioso me atrae, ya lo que es el libro físicamente me parece de los más bellos que tengo en mi colección (esto, Blackie Books sabe hacerlo muy bien), pero es probable que si leéis ambos os guste más Vozdevieja.

Sí que os digo que Elisa Victoria es una escritora a la que tener muy en cuenta, a la que yo pienso seguir y leer todo lo que publique, porque esa cotidianidad que destilan sus novelas, son como un bofetón a mano abierta pero siempre desde la bondad de sus protagonistas.

Bizcochito, una de las canciones del último disco de Rosalía, ha sido mi Banda Sonora, esa canción me encanta, y es que realmente podía ver a Marina bailándola con esa actitud llena de desparpajo que tiene, ¡me encanta!

Esta vez, más que recomendar este libro, os recomiendo directamente a su escritora.